Pero... ¿cómo coño lo hacen?

Esta foto que abre el post es el resumen de una pobre sesión del pasado sábado en Salinas, no fue mala sólo por la compañía que tuve (Oyisti y El Rano) pero no por las olas que lo eran, de solemnidad.

Esto fue poco después de la que llamaron "semana fantástica", los blogs no pararon de vomitar fotos y vídeos de unas condiciones casi-perfectas en casi todos los puntos del norte de España consecutivamente durante más de una semana. Mientras tanto yo, aparte de viendo estos blogs, estaba currando y en el fin de semana no me encontré con más que puxarra.

Esto es una constante en mi vida como surfero, cuando no fue el instituto fue la carrera y luego empezar a currar. El caso es que nunca pude permitirme (salvo en verano con jornada continua) el entrar por semana en condiciones normales, poniendo todos los huevos en la cesta del fin de semana.

Sin embargo, si me paso por delante de la playa siempre veo gente en el pico. De hecho, durante dos años tuve la oficina con vistas a la playa y pude comprobar que nunca había ola que rompiese virgen, sin alguien surfeándola.

¿Cómo lo hacen? No sé. Pensé que sería gente que trabaja a turnos pero me fijé que los había que entraban siempre que había olas. Trabajar a turnos te puede dejar tiempo libre, sí, pero no siempre te va a cuadrar con el mejor punto de marea. Habrá un porcentaje de surferos que sí trabajarán a turnos pero no todos.

¿Estarán en el paro? Eso sí puede ser, pero, deben de tener una paga muy buena y muy larga porque a muchos de eso no los veo privarse de la última tabla, el mejor traje y una vw para ir a la playa.

¿Vivirán de las rentas? ¿alguna herencia?

La verdad es que es un misterio para mí (de todo mi entorno surfero sólo conozco a una persona que lo haga y a otra que lo puede hacer y no lo hace, cada uno con sus circunstancias). Supongo que mucha de esta gente habrá construido su vida en torno al surf, habrán buscado un trabajo que les permita el mejor horario para compatibilizarlo con los baños, sus familias tendrán la paciencia suficiente con ellos para acomodarse a su afición, etc. Todo ello, supongo, estará rodeado de importantes sacrificios, sobre todo en la parte personal porque no todos esos factores que hay que combinar son fáciles de acomodar.

En resumen, por un lado, siento envidia de esa gente que veo siempre en la playa y en las fotos de los blogs, pero, por otro, entiendo que he escogido mi propio camino, aunque no haya sido consciente al 100% y que no soy tan adicto al surf como para encajar eso sacrificios de los que hablaba antes ni de renunciar a muchas de las "incompatibilidades" que tengo con el surf, aunque, claro, quizás para ellos no sean sacrificios sino una de los cosas más que hay que pagar para poder atender a su obsesión.

Os dejo este antiguo vídeo de Jim Box. El título me viene al pelo.



Y vosotros ¿qué pastilla habéis elegido?